lunes, 1 de marzo de 2010

Huerto urbano, febrero - Hiri ortue, otsaila

¡Por fin¡ dos meses después hemos hecho nuestra primera recolección de lechugas. Todo un éxito! Estaban riquísimas, el sabor intenso, jugosas y de un verde increíble. Como podéis ver sólo hemos cogido las hojas de lechuga que íbamos a comernos, dejando que el resto de la lechuga siga creciendo. Esto tiene un inconveniente, la lechuga puede florecer antes y su sabor se volvería amargo, por eso, sólo usaremos hojas de la misma lechuga hasta acabarla. De la tierra al plato, frescas y ricas.

En la anterior entrega os mencionamos la “producción continua”. Es tan fácil como conseguir que tengamos vegetales frescos semanales. Tan fácil como que si comemos dos lechugas a la semana, plantaremos dos lechugas a la semana. Para ello hay que controlar el tiempo de crecimiento de cada vegetal que plantemos.

Este mes entramos en la primavera, maravillosa época del año en la que ya podemos decir a gusto… ¡a plantar se ha dicho!

Empezamos con las zanahorias, hemos elegido una variedad fácil de cultivar, de crecimiento rápido, que nos dará zanahorias menos largas pero más gorditas. Por supuesto de cultivo biológico. Las hemos plantado directamente en el recipiente hundiendo las semillas medio centímetro. Las zanahorias no aguantan el trasplante de plantel a tierra. El recipiente elegido debe tener bastante profundidad, tened en cuenta que estos vegetales crecen para abajo. Las semillas una vez plantadas empiezan a crecer unos 15 días después. Para acelerar el crecimiento podéis sumergir las semillas en agua 24 horas antes de plantarlas.

Junto con las zanahorias hemos plantado un par de ajos. ¿Recordáis el término “asociación de cultivos”? pues las zanahorias y los ajos se llevan de maravilla. Los ajos tan guerreros como siempre protegerán nuestras zanahorias de agresiones animales. ¡Malditos bichitos!

Por otro lado, como lo prometido es deuda, a principios de mes plantamos fresas (que no fresones), los fresones son más grandes pero tienen mucho menos sabor. El crecimiento con los primeros rayos de sol del final del invierno ha sido espectacular, incluso ya han dado flor y ya sabéis una flor, una fresa. Es la época de plantar fresas ya que necesitan el frío del invierno y los primeros rayos de la primavera para crecer en condiciones. No hace falta que elijamos una maceta con mucha profundidad.

En nuestro cuaderno de incidencias tenemos que mencionar a Xynthia, la ciclogénesis explosiva. Pasó por nuestra tierra con vientos que arrasaron la zona. Por supuesto nuestro huerto pasó la noche dentro de casa y no hubo mayores bajas vegetales, aunque sabemos que causó muchos destrozos por la zona. Como siempre decimos, ¿en qué huerto se pueden proteger así los vegetales?

Para terminar el perejil que es un chico fácil, crece a gusto y sin sobresaltos. Hemos vuelto a plantar lechugas para finalmente hacer una producción continua de ellas. Y otra alegría en nuestro huerto, en verano trajimos bulbos de Jacintos que plantamos en enero y… han florecido! Su olor es increíble, si los metemos en casa dan olor a toda la habitación.

Este mes plantaremos tomates. Nuestro huerto crece y crece sin parar, tendremos que pedirle el balcón prestado al vecino para seguir plantando… ups.